La bala

Autor y director: Sergio López Vigueras

Actuación: Marisol Osegueda, Ismael Sangal y Gerardo del Razo (Beneficiario del Programa Creadores Escénicos 2017-2018 del FONCA)

Es más fácil en la mañana

Con música se presentan, de modo alguno, cada personaje; en sus lugares, ocupan tres de las cuatro esquinas del escenario visible para el público (a su vez a la vista del otro), introducen al espectador en el ambiente. El escenario está al centro de las dos áreas de butacas que cada espectador elige porque los asientos no están numerados, aunque lo estén los boletos de acceso. Desde donde se siente, será visible la acción y audible. La situación es reconocible –lamentablemente- por muchos de los asistentes independientemente de la edad.

La dirección ha propuesto tanto cambios de iluminación como interacciones con las zonas de espectadores para indicar cuando hay interacción en tiempo, digamos, real y cuando se trata de pensamientos explícitamente narrados. El texto ha sido reconocido con el “Premio Nacional de Dramaturgia Joven Gerardo Mancebo del Castillo 2017”. El boletín de prensa señala que: La dramaturgia de La bala, se distingue por su trepidante ritmo narrativo donde se pueden advertir guiños poéticos, concisas figuras retóricas y un empleo del lenguaje excepcional que cuenta con la virtud de enunciar incidentes desagradables de forma casi cinematográfica. Es una obra sobre la valentía y la decisión de actuar, para no aceptar una realidad que nos ha sido impuesta con violencia.” Acuerdo con lo anterior.

Por otra parte es preciso decir que el autor es el director de esta producción del Centro Cultural Helénico, que le ofrece una mirada diferente ante lo que ocurre. El tipo de escenario (con público en ambos lados, de frente, la escena al centro) obliga a que los actores atiendan a su auditorio. Sin ser exagerado, grandilocuente o fársico, La bala expone una posibilidad para los involucrados en la situación. Pero el público es parte de esa situación, reconoce lo que ocurre y se indigna ante frases como “es más fácil en la mañana”. Una propuesta, sin duda, catártica o liberadora porque el final es sorprendente y sin ser “agitadora”, aporta una explicación a una reacción irracional en voz propia.

Los dos planos de realidad que muestra, el mundo interior de cada uno de los personajes y el instante de realidad en que ocurre el asalto, son llevados con agilidad, en armonía cada cambio y con el tiempo preciso. Exige, en los actores, dominio de la escena y en los espectadores, que atiendan más allá del recuerdo o las ideas previas que se pueden tener ante la situación.

“Tengo la sangre helada” dice ella, por la hora de abordaje -6:45am- cuando en la sala ya pasa lo mismo por la presencia del reconocible asaltante. Ella nos cuenta su dia a día, con lo que la identificación con el personaje logra captar la atención y seguir el relato de “promesa, reclamo, pelea”; por su parte, él nos dice quién es y cuenta que “el maletín, repleto de tareas que copian de internet” es prueba de la situación educativa de este país. Así vamos atentos y dentro del transporte público, aunque estemos fuera y sentados ene l teatro. Cuando se rompe el relato ameno de ambos inicia la liberación en quienes hemos vivido tal experiencia y la indignación en todos ya que una causa es: “que la gente sepa quién manda en esta ruta” o “asaltar es como coger, es cuestión de ritmo”. La sala se suma a los parlamentos de cada personaje reaccionando con exclamaciones, gestos y el ambiente connota que la puesta a atrapado al auditorio completo, entonces “siento lo que no había sentido en años, desde la infancia: miedo”, pero también “percibo a ciegas una furia que no conocía” y “si en toda mi vida voy a hacer una sola cosa, va a ser esta”.

El deseo de que la bala sea un “águila implacable” se materializa –en algunos hace de exorcismo- ideas y programaciones producto de una cotidianeidad que lamentablemente ocurre. Cada uno de los personajes ha hecho lo que no creía poder hacer y se relaciona con los otros en la perplejidad y con afán de que la vida sea plena. Entonces le dice su nombre, le da la mano y hay esperanza en la escena y en la sala.

David Gaytán dice que: "Es una obra de teatro tan exacta que merece estudiarse en todos los cursos de dramaturgia. Sergio López Vigueras manipula el pensamiento de sus personajes con tal desparpajo que termina por hacer todo un planteamiento estilístico. La obra convierte lo aparentemente banal en capítulos de filosofía, hace de un cruce de miradas una película de acción y con un engaño de cotidianidad nos arrincona hasta reflexionar sobre la humanidad".

 “Es una obra muy recomendable ya que trata una problemática actual, y que por desgracia, vivimos como ordinaria. Uno nunca sabe en qué papel va a estar, y como va a reaccionar si le llega a pasar algo así. El final estuvo inesperado, sorpresivo…Nada que yo me hubiera esperado. Uno no sabe cómo va a reaccionar cuando tu vida depende de dos cabrones que quien sabe si van a disparar o no, si están conformes con lo que les das o no… Esa adrenalina que corre por nuestras venas nos hace ser alguien que nunca nos imaginamos, tal cual ocurre en la obra.” Lo anterior en palabras de un joven adolescente que, emocionado, aplaudió emotivo al término de la función. Su nombre: Vladymir Jasso, a quien agradecemos la participación en la presente nota con su comentario.

​Para terminar la presente nota, subrayar el marco formativo del elenco, mismo que fortalecen la solidez del trabajo, así cabe decir que el autor-director es Sergio López Vigueras, cuya formación innegable es en Literatura Dramática y Teatro en la UNAM, donde se estudia el teatro así como Ismael Sangal, uno de los actores, también egresado en el área de actuación, por su parte Gerardo del Razo es egresado del Centro Universitario de Teatro de la UNAM y Marisol Osegueda cuenta con estudios en el Instituto Superior de las Artes (ISA) en la Habana, Cuba y en la Facultad de Teatro de la Universidad Veracruzana donde logra el título de Licenciada en Teatro.  

Debo agradecer el apoyo de Gaddi Miranda para la realización de la presente nota y a todo el equipo que labora en el Centro Cultural Helénico por las facilidades otorgadas , así como a Felipe de J. Huerta Z., por la edición del video que acompaña.

Alma Torices

teatrista

Funciones: viernes 20:30hrs., hasta el 27 de julio de 2018

Teatro: Foro La Gruta del Helénico, centro cultural, Av. Revolución 1500, col. Guadalupe Inn, cerca metro Barranca del Muerto, en contra esquina de la casa de retiro Arturo Mundet

Localidad: $200°° general y disponibles, además de la taquilla del teatro, en el sistema Ticketmaster.

Duración: el programa de mano indica 90 minutos, la experiencia dice que son 45minutos. Usted dígame, por favor

Accesibilidad: En silla de ruedas se complica el ingreso al edificio por los menos de diez escalones, no obstante con ayuda se puede subir una silla de ruedas o ingresar con muletas.