Ménade
Teatro en CDMX
La intervención de Verónica
Autor y director: Martín Zapata
Compañía Titular de Teatro de la Universidad Veracruzana
Actuación: Lara Baillet, Estefanía Ahumada, Katia Lagunes, Sandra Campuzano, Dalia Balp y David Hevia
Beso en la frente o pene en el culo
Un piso vinil blanco es la base para cuatro camas con sus burós, una cajonera y un ropero, muebles del cuarto compartido por las internas del orfanato donde trabaja la profesora Verónica, titular de la clase de biología cuya formación inicial es de enfermería. Entre la charla con “las intrépidas”, les dice que una relación esporádica es un intento fallido. El tema sexual se hace presente con la inocencia de niñas cercanas a los quince años, que viven en un orfanato. El diálogo atrapa al espectador por lo directo y lo ingenuo de las reacciones y respuestas. La pregunta es si hay algo de lo que sientan vergüenza. Respuestas diversas como haber matado a un perro o un simple si que asoma vergüenza. “¿Has probado hombre? / ¿Le gustan las almejas? No, sólo el colibrí y hace mucho no lo como.”
Así los primeros minutos que enganchan al espectador, debe verla.
Entre mujeres la plática sería convencional, pero un adulto con cuatro niñas, adolescentes para ser precisos, pero menores al fin y al cabo, propician un extrañamiento entre los espectadores. Es fuerte lo que dicen porque el público sabe a qué se refieren; las internas están al cuidado –ybondad- de quienes resguardan una casa para estos menores en estado de indefensión, eso, la situación en contexto, resaltan el patetismo de la situación dramática en escena.
La dirección de Martín Zapata, juguetona y dueña de la inocencia de las niñas (adolescentes), deja ver detalles como la botella de rompope con líquido que parece rompope –por el color y el peso- o bien el detalle de quitarse los calzones antes del contacto sexual. Del mismo modo, hace invisible, aún para el espectador de la primer fila, el momento de la intervención quirúrgica. La complicidad de ellas y lo reconocible del momento deja mudo al espectador. Uno que otro varón, acaso nervioso, ríe o exclama algo, sin embargo, en general, las personas mantienen la atención en la escena y cada quien juzga si es el medio o no para poner fin a tal. Frases que son sabidas por diversos medios, son dichas en voz de una menor y la sensación cambia radicalmente. Ellas, Katia (Katia Lagunes), Estefanía (Lara Baillet), Romina (Estefanía Ahumada) y Sandra (Sandra Campuzano Alvarado) con uniforme, calzado y peinado escolar; la profesora Verónica (Dalia Balp) con traje sastre azul cielo, peinado impecable y maquillaje discreto, dan la idea de orden, por tal contrasta la perversión que el espectador ya vislumbra entre las alumnas y el profesor, hijo de la dueña del orfanato. Hombre cincuentón, “de buenos sentimientos, pero muy enamoradizo”, que “te habla de literatura mientras te baja los calzones” y que también “huele a naftalina”; personaje interpretado por David Hevia. En esta puesta no lo verá retorcerse más o exagerar más allá entre los desvaríos del sedante que le dan y al momento de caer hasta podrá liberar tensión y reír un poco.
La puesta en escena es una producción entre dos instancias públicas, una la Coordinación Nacional de Teatro del INBA y la otra, la Universidad Veracruzana que contó, según se aprecia en el programa de mano, con la mirada crítica, entre otros, de Luis Mario Moncada, y Mauricio Jiménez, sin que ello reste crédito a los creadores. Por el contrario, confirma que se trata de un montaje cuidado y observado por especialistas. El conjunto hace que sea dinámico y mantenga la atención. La puesta debe ser vista no sólo porque esté en breve temporada, sino porque el discurso de abuso a menores es expresado de forma ligera, la venganza o toma de justicia por mano propia se hace fluida y sin la visión de crimen. Todo se hace por amor, así como se hace el delito se lleva la justicia. Durante la representación quedan reflexiones que aquí se comparten en forma de pregunta: ¿es “destino” ser amada y después cambiada?, ¿tú, mi perro cogelón y yo, tu puta?, ¿así son las cosas y ya nada puede cambiarlas? Sin duda debe ver esta puesta en escena cuyo trabajo es limpio, preciso, con ritmo tal que no le permite la mínima distracción.
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Si las mujeres son o no diosas encarnadas, parece que el tema de ‘escoger’ al novio es cosa del pasado o bien sólo para un tipo de sociedades, pero si ha notado que el uso del cuerpo femenino es lo que vende entre la publicidad, quizá sea pertinente que se pregunte qué acciones mantienen pensamientos denigrantes. Desde estas líneas se puede decir que en un país feminicida bien valdría la solución radical que cortara de tajo las acciones ofensivas de adultos a menores, de fuertes a débiles, de poderosos a subordinados. Sería otra relación entre las personas, ciertamente como dicen en la obra, “costará sangre, pero será un mundo diferente”. Cada persona se hace, o no, responsable de salvar “almejitas” y probar que la justicia existe. Aquí, el momento de mayor compromiso ya que se permite al espectador hacer un pacto consigo en relación a la situación que acaba de presenciar, conviene que usted se pregunte de qué modo le toca realizarlo en su vida cotidiana.
¿Por qué debe verse La intervención de Verónica? Porque cuando un menor necesita un beso en la frente no debe recibir un pene en el culo. No hay razón, o no debería haberla porque la inocencia, la infancia, debe ser respetada y la puesta en escena sería apenas una ficción impensable. La realidad indica que las relaciones de poder se establecen en todo lugar, entre todo tipo de persona y que ahí, en la interrelación entre las personas se puede llegar a la justicia, a darle a cada quien lo que a cada quien le corresponde. No es humor negro lo que hay en escena. Las intervenciones musicales favorecen que el espectador se relaje y atienda sin prejuiciar. Todo es común, normal, cotidiano, permitido…
Una propuesta escénica que se desarrolla en un orfanato, pero que está latente en cualquier sitio donde existe un adulto que abusa de un menor, es el espacio de la intimidad y la infancia lo que vemos en ese cuarto de orfanato. No es la escuela o la maestra quienes salvarán a las niñas, sino es el conocimiento, la preparación y la templanza con lo que se puede llegar a una propuesta definitiva para indicar que un cuerpo no es un juguete, que una relación sexual exige igualdad o, al menos en esta sociedad, la mayoría de edad. No verá usted una clase de moral, no hay juicios vanos; es un intento por formar la unidad para que a ninguna almejita más le pase.
Acuda al teatro El Galeón y sea parte de La intervención de Verónica que lo cautivará por precisa, limpia en el trazo, concreta en lo que quiere que usted vea y sin juicios para que usted viva el hecho escénico y tome conciencia de sus conductas en su entorno y vida cotidiana. En la página del INBA se puede leer, al respecto de la obra: “Al enterarse del secreto amoroso de cuatro jovencitas de un orfanatorio femenil, la maestra Verónica decide intervenir de una manera escalofriante.” ¿Usted lo haría? De pronto, intervenga de jueves a domingo en el Centro Cultural del Bosque para que compruebe si hay o no juicios de valor en la situación. Observe a su alrededor y pregúntese de qué se ríe, usted o los asistentes. La dirección es puntual y las jóvenes actrices están en el personaje preciso, aunque sin duda, el trabajo actoral de Dalia Balp lo sorprenderá, por eso debe ver la puesta en escena que culmina temporada el 25 de marzo.
Para concluir, agradecer el apoyo de los responsables de medios del Centro Cultural del Bosque, particularmente a Gabriel, por las facilidades otorgadas para la realización de la presente nota. El video fue tomado durante la representación con la finalidad de mostrar lo preciso en las acciones y la naturalidad en ellas. Acuda a la puesta y observe en qué momento de la historia se lleva este momento.
Alma Torices
teatrista
Funciones: jueves y viernes 20hrs., sábados 19hrs., domingos 18hrs., hasta el 25 de marzo de 2018
Teatro: El Galeón, Centro Cultural del Bosque, Paseo de la Reforma y Campo Marte s/n, metro Auditorio, atrás del Auditorio Nacional.
Localidad: $150°° general, 50% de descuento para maestros, estudiantes e INAPAM con credencial vigente al momento de mostrarla en taquilla (horario de taquilla para el mismo día y preventa hasta una hora antes: lunes-viernes de 12-15hrs., y 17-20hrs.; sábados de 11-15hrs., y 17-19hrs., domingos de 11-14hrs., y 16-18hrts., teléfono de taquilla: 1000 5600 ext. 4568. Gente de Teatro $45°°, “jueves al Teatro” $30°° general y “Viernes al Teatro en Bici” $45°°.)
Duración: 105 minutos
Accesibilidad: cerca está el metro y Reforma provee diversas rutas de trasporte público, cerca hay estacionamiento (cuesta $75°° o bien llegar muy temprano –eso quiere decir más de dos horas antes de la función- y pasar primero, por si alcanza lugar en el estacionamiento. El teatro cuenta con una escalera para acceder al foro por lo que requerirá ayuda en caso de ir en silla de ruedas y sin problema subir en caso de muletas porque es ancha, dentro de la sala hay rampa. Los sanitarios también están en la planta superior.
Adicional: La cafetería Inna, única en la zona, le cobra el café como ‘chico’ si usted lleva su termo o taza aunque sea de tamaño mediano o grande, así que, aproveche y apoye la eliminación de residuos desechables con responsabilidad en su consumo.